1046 - EMPLEO DE INMUNOGLOBULINAS E INMUNOSUPRESORES INTRAVENOSOS EN HOSPITAL DE DÍA TRAS PUESTA EN MARCHA DE CONSULTA DE ENFERMEDADES AUTOINMUNES
Hospital Virgen de la Luz. Cuenca.
Objetivos: Revisar los tratamientos con inmunoglobulinas e inmunosupresores intravenosos administrados en el Hospital de día de Medicina Interna del H. G. Virgen de la Luz de Cuenca tras la puesta en marcha de la U. de Enfermedades Autoinmunes en el año 2016.
Métodos: Se realizó un estudio retrospectivo observacional desde el 01 de enero de 2016 al 15 de junio de 2021 en el cual se incluyeron todos los pacientes que recibieron tratamiento con inmunoglobulinas o inmunosupresores intravenosos (rituximab, ciclofosfamida, belimumab y tocilizumab). Además, se realizó una comparativa con los tratamientos administrados en el Hospital de día antes de poner en marcha la consulta específica en Enfermedades autoinmunes.
Resultados: Se incluyeron 20 pacientes con diferentes diagnósticos: lupus eritematoso sistémico, vasculitis ANCA+, esclerosis sistémica, síndrome anti sintetasa, inmunodeficiencia común variable, arteritis de células gigantes, poliarteritis nodosa, vasculitis del SNC, miopatía inflamatoria, Sjögren con afectación pulmonar, mielitis autoinmune y enfermedad mixta del tejido conectivo. El 75% de los pacientes recibieron tratamiento con algún inmunosupresor: rituximab (45%), ciclofosfamida (45%), belimumab (10%) o tocilizumab (5%). Desde la puesta en marcha de la consulta, se han administrado 105 dosis de inmunosupresores. El 40% de los pacientes recibieron tratamiento con inmunoglobulinas. Previo a la puesta en marcha de la consulta la única indicación por la que se empleaban las inmunoglobulinas intravenosas era en el 100% la inmunodeficiencia común variable. Tras la puesta en marcha de la consulta, se han administrado para otras indicaciones: vasculitis ANCA+, esclerosis sistémica, síndrome antisintetasa y miopatía inflamatoria.
Discusión: La puesta en marcha de una consulta específica de enfermedades autoinmunes, ha supuesto un aumento importante del uso de fármacos inmunosupresores intravenosos que previamente no se empleaban en el Hospital de día de Medicina Interna. Además, ha ampliado las indicaciones por las que se administran las inmunoglobulinas intravenosas.
Conclusiones: Previamente el manejo de los pacientes se realizaba con glucocorticoides ± inmunosupresores orales. Desde la puesta en marcha de dicha consulta se han administrado hasta 105 dosis de fármacos inmunosupresores. Esto se justifica por la presencia de un médico especializado en el manejo de estos pacientes y tratamientos. En cuanto al uso de inmunoglobulinas intravenosas, las indicaciones por las que se prescriben se han ampliado, pasando de emplearse únicamente en pacientes con IDCV a pacientes con diferentes patologías autoinmunes (ES, miopatía inflamatoria, vasculitis y síndrome antisintetasa) por el mismo motivo.
